Azules esmeraldas se estampan en el piso
lo seducen, lo observan
se resposan como bobas.
Barren el cemento
Construye, escucha.
Amenecen formas
Se despiertan los dedos que
Recorren el pie como largas fuerzas
Qie se chocan, y suben.
Se despiertan las manos
Que huntan, dibujan, moldean
Como un auto a su mecánico.
Escriben.
Se reescribe
Los peces aparecen como agua escurridiza,
Que te da risa, y te mira.
Te incita, como el sol a las flores,
Como una escalera a Romero,
Como el Oscar a las estrellas,
Como un bar a los borrachos.
Una musa que embriaga y te dilata
Casi te mata, pero te ama.
Te ama, y ama, y ama y ama.
Como una casa en llamas.
Ni los volcanes, ni los tranvías, ni las espadas.
Nada. Esclavas del tiempo, como hadas en un bosque
Como San Jorge y el Dragón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario